Los Mochis, Sinaloa.- Ante el regreso a clases, y luego de que este se realizara ya al 100 por ciento de manera presencial y sin horario completo, padres de familia de la escuela Primaria Genera l Antonio Rosales, sobre todo de primer grado, mostraron su molestia luego de darse cuenta como a la hora de la salida sacan a los niños y los dejan a su suerte, sin darse cuenta si sus padres pasan por ellos.
Algunos de los inconformes, quienes pidieron guardar el anonimato para no afectar más a sus hijos, explicaron que se ven niños llorando, pues por ser de nuevo ingreso no están acostumbrados a estar solos entre la multitud de padres que van por sus hijos a la escuela.
“Nos piden llegar a tiempo, incluso muchos padres hacen doble fila, ya se imaginará el caos que se hace a la hora de la salida, muchos de nosotros encontramos llorando a nuestros hijos porque no están acostumbrados, en el kínder, a los que les tocó ir antes de la pandemia, nos dejaban pasar a por ellos a su salón, y ahora nos los sacan de la escuela y ahí los dejan, bien puede pasar alguien y por su inocencia llevárselos”, lamentó una madre de familia.
Ante el malestar que esto ha provocado, algunas madres ya lo han hablado entre ellas, descubriendo que no es la única escuela donde ocurre, pues varias vienen de otras instituciones educativas donde los profesores no tienen un control adecuado que garantice la seguridad de los niños a la hora de la salida.
“En todas las escuelas es lo mismo, sacan a los niños, los ponen ahí para que los papás los vean y le griten, pero con el ruido que hay el niño no te escucha, si por alguna razón no llegas a tiempo ahí se queda, antes estaba una señora que vendía dulces y a veces ella cuidaba a algunos niños, pero con lo de la pandemia ya no vende y los niños quedan expuestos”, expresó otra de las afectadas.
Otras madres de familia, quienes tienen hijos que cursan desde tercero a sexto grado, aseguran que no es un problema nuevo, pues señalan que ya se le ha planteado la situación al director, lamentando que al parecer no le importa porque hace caso omiso a los reclamos.
“Cuando yo llegué había mucha gente, la calle cerrada porque hacen doble fila, por fortuna llegué a tiempo, pero igual así me dejan al niño ahí afuera y se espanta, la verdad a mí nunca me explicaron la dinámica de la escuela, y sí nos da coraje y tristeza a la vez, porque al menos en el kínder tú vas por tu hijo al salón, pero aquí no, los sacan de la escuela y los ponen ahí donde te señale y tú le gritas para que vaya a donde estás tú”, lamentó otra madre de familia.
