México.- Una mujer platicó la alarmante experiencia que vivió en una plaza.
La mujer explicó que visitaron la plaza porque su hijo estaba enfermo y decidieron dar un paseo, además de disfrutar una nieve para relajarse a lo que decidieron sentarse en una de las bancas de dicho lugar a pasar una tarde tranquila en la plaza.
Mientras estaban allí, otra mujer se sentó a sus espaldas en otra banca cerca de ellos y les ofreció perfumes, y les dijo que estaba vendiendo perfumes, a lo que muy insistente le pidió que oliera una de las fragancias que traía, y aunque la mujer se negaba a oler, logró percibir un poco el aroma.
La mujer no le tomo importancia, pero poco después se empezó a sentir mal, con una pesadez, mareada, y sintiendo entumida en gran parte de su cuerpo, a lo que decidió levantarse, agarró fuertemente a su hijo, y decidió buscar ayuda en una tienda cercana.
Mientras iba caminando iba sintiéndose mal, y pidió ayuda entrando a una tienda muy conocida dentro de la plaza, en donde los trabajadores de dicha tienda le comentaron que estos casos ya se habían presentado con anterioridad, y amablemente le ayudaron a la mujer a calmarse y brindarle un poco más de seguridad.
La mujer decidió compartir su experiencia para que tengan mucho cuidado con este tipo de acciones, poniendo el foco de atención a todos los padres de familia, y las mujeres que andan solas a estar alerta.
